Oración Comunitaria 01/10/2015
ORACIÓN COMUNITARIA 1/10/2015
Próximos a la fiesta de San Francisco, nos unimos en oración un jueves
más frente al mismo Cristo que habló al pequeñuelo de Asís, para que nos diga
hoy también a nosotros cómo podemos ser instrumentos del Padre en nuestra sociedad.
Comencemos pues, diciendo juntos : ¡Oh Alto y Glorioso Dios…!
Vida
primera según Celano, nº 21-22
Entre tanto, el santo de Dios, cambiado su vestido exterior y restaurada la
iglesia ya mencionada [la de San Damián], marchó a otro lugar próximo a la
ciudad de Asís; allí puso mano a la reedificación de otra iglesia muy
deteriorada y semiderruida [la de San Pedro]... De allí pasó a otro lugar
llamado Porciúncula, donde existía una iglesia dedicada a la bienaventurada
Virgen Madre de Dios, construida en tiempos lejanos y ahora abandonada, sin que
nadie se cuidara de ella. Al contemplarla el varón de Dios en tal estado,
movido a compasión, porque le hervía el corazón en devoción hacia la madre de
toda bondad, decidió quedarse allí mismo. Cuando acabó de reparar dicha
iglesia, se encontraba ya en el tercer año de su conversión. En este período de
su vida vestía un hábito como de ermitaño, sujeto con una correa; llevaba un
bastón en la mano, y los pies calzados. Pero cierto día se leía en esta iglesia
el evangelio que narra cómo el Señor había enviado a sus discípulos a predicar;
presente allí el santo de Dios, no comprendió perfectamente las palabras
evangélicas; terminada la misa, pidió humildemente al sacerdote que le
explicase el evangelio. Como el sacerdote le fuese explicando todo
ordenadamente, al oír Francisco que los discípulos de Cristo no debían poseer
ni oro, ni plata, ni dinero; ni llevar para el camino alforja, ni bolsa, ni
pan, ni bastón; ni tener calzado, ni dos túnicas, sino predicar el reino de
Dios y la penitencia, al instante, saltando de gozo, lleno del Espíritu del
Señor, exclamó: «Esto es lo que yo quiero, esto es lo que yo busco, esto es lo
que en lo más íntimo del corazón anhelo poner en práctica». Rebosando de
alegría, se apresura inmediatamente el santo Padre a cumplir la doctrina
saludable que acaba de escuchar; no admite dilación alguna en comenzar a
cumplir con devoción lo que ha oído...
NOTICIA:
Hoy es el «Día Internacional de las personas mayores», fecha que se celebra
anualmente desde que así lo estableciera Naciones Unidas en 1990. El objetivo
final es concienciar a la población
mundial de la importancia que tienen nuestros mayores en la sociedad.
En nuestro país hay en la actualidad 8
millones de mayores. Desde la Confederación
Española de Organizaciones de Mayores (CEOMA) lamentan que tal día como hoy
no se hayan convocado más acciones por parte de las administraciones para recordar
el importante papel que estas personas representan en la sociedad. «Todavía hoy
son muchos los mayores que están realizando grandes esfuerzos para mantener a sus hijos y nietos por los
efectos de la crisis», afirma José
Campo, vicesecretario de Ceoma. Qué menos que un homenaje para ellos, al igual que para las personas que viven
solas, que están enfermas,
que son dependientes, que cuidan
sin apenas recursos ni fuerzas de otros mayores...».
Explica que aún son muchas las
necesidades de este segmento de la población. Entre las más urgentes está la de
adecuar las pensiones a la
situación de los mayores porque muchos de ellos, apenas tienen para pagar el
recibo de la luz y el agua.
Otra de las demandas va dirigida de lleno a la legislación para que «en el
momento que se plantee una ley que afecte a los mayores, dentro de la mesa de
negociación esté presente alguna persona u organización que los represente».
Aún así el vicesecretario de Ceoma
reconoce que queda mucho por hacer para
que la sociedad en su conjunto valore a este colectivo. «Estas personas
valen mucho más que para jugar a las cartas cada tarde en las asociaciones. Los
ayuntamientos deberían programar muchas otras actividades de interés, por
ejemplo culturales, porque el dominó o el parchís está muy bien, pero hay mucho
más que pueden hacer».
Mateo 10,5-14
Jesús envió a estos doce con las
siguientes instrucciones:
–No os dirijáis a las regiones de los paganos ni entréis en
los pueblos de Samaria; id más bien a las ovejas
perdidas del pueblo de Israel. Id y anunciad que el
reino de los cielos está cerca. Sanad a los enfermos,
resucitad a los muertos, limpiad de su enfermedad a los leprosos y expulsad a
los demonios. Gratis habéis recibido este poder: dadlo gratis. “No
llevéis oro ni plata ni cobre ni provisiones para el
camino. No llevéis ropa de repuesto ni sandalias ni bastón, pues el obrero
tiene derecho a su sustento.
“Cuando lleguéis a un pueblo o
aldea, buscad a alguien digno de confianza y quedaos en su casa hasta que
salgáis de allí. Al entrar en la casa, saludad a los
que viven en ella. Si la gente de la casa lo merece,
la paz de vuestro saludo quedará en ella; si no lo merece, volverá a vosotros. Y si no os reciben ni quieren escucharos, salid de la casa
o del pueblo y sacudíos el polvo de los pies.
ORACIÓN COMPARTIDA
PADRENUESTRO
SALIDA
¡Señor, haced de mí un instrumento de tu paz!
Que allí donde haya odio, ponga yo amor;
donde haya ofensa, ponga perdón;
donde haya discordia, ponga unión;
donde haya error, ponga verdad;
donde haya duda, ponga fe;
donde haya desesperación, ponga esperanza;
donde haya tinieblas, ponga vuestra luz;
donde haya tristeza, ponga yo alegría.
¡Oh, Maestro!, que no me empeñe tanto en
ser consolado, como en consolar;
en ser comprendido, como en comprender;
en ser amado, como en amar.
Pues dando, se recibe;
olvidando, se encuentra;
perdonando, se es perdonado;
muriendo, se resucita a la vida eterna.