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Etiquetas: oración del jueves

Oración Comunitaria 11/09/2014

Entrada:
            Comenzamos un nuevo curso, lleno de retos, de ilusiones, de proyectos, de vida. Optar por Cristo Jesús es creer en un paso adelante de la humanidad. Consiste en creer que el Amor (Ágape) es más fuerte que la Muerte (Thánatos). Es creer que hay algo nuevo que vendrá: la resurrección. El cristiano trata de hacerlo con la firme esperanza de encontrar al otro lado la vida nueva en Dios.
            Vivamos una espiritualidad de la esperanza. La esperanza parte de la convicción de que todas las cosas están llamadas a ser en plenitud. Nos arranca de la nostalgia sobre el pasado y nos orienta a construir, con realismo, el futuro posible. Cada “ahora” es una ocasión, pero no es la última ocasión.
La esperanza me da la certeza de que cada relación que emprendo tendrá continuidad, no sé cómo, pero sé que el lazo es eterno.
Si nuestra esperanza fuera robusta, esta noticia transformaría radicalmente la manera de vivir, de comunicarnos, de enfocar la existencia, porque viviríamos despreocupados por el futuro, alegremente, centrados en el ahora, pero no desesperadamente, sino con la confianza de que todo será vivido con más profundidad y más calidad.
Con Francisco, comenzamos diciendo: OH ALTO Y GLORIOSO DIOS… 

SALMO (Isaias 40, 27-31):
¿Por qué dices tú, Jacob,
Y lo repites tú, Israel:
Yavé no me mira,
Mi Dios descuida mis derechos?
¿Acaso no lo sabes, o no lo has oído?
Yavé es un Dios eterno
Que ha creado hasta los extremos del mundo.
No se cansa ni se fatiga,
Y su inteligencia no tiene límites,
Él da la fuerza al que está cansado
Y robustece al que está débil.
Mientras los jóvenes se cansan y se fatigan
Y hasta pueden llegar a caerse,
Los que en Él confían recuperan fuerzas,
Y les crecen alas como de águilas.
Correrán sin fatigarse
Y andarán sin cansarse.

Noticia:Decenas de musulmanes desafían al Estado Islámico y salvan a sus vecinos cristianos
Los refugiados cristianos en la zona kurda de Erbil y los yazidíes cuentan por cientos, las historias de los vecinos musulmanes que salvaron sus vidas pese a los riesgos.
El diario italiano 'Il Corriere della Sera' los ha llamado 'Los Schindler musulmanes'. Son personas anónimas, musulmanes, que desafían la cruel barbarie del Estado Islámico, y salvan las vidas de sus vecinos, que sólo se diferencian de ellos por su religión.
Las historias de estas personas se repiten. Como la de un rico hombre de negocios que compró a varias de mujeres yazidíes en el mercado de esclavas de Mosul. Las llevó a Baghdad, donde las envió por avión a sus familias en la provincia kurda.
Son suníes, pero condenan la violencia y el fanatismo. Hablan de ellos los refugiados cristianos en la zona kurda de Erbil. Por cientos, cuentan de sus vecinos musulmanes que salvaron sus vidas. Si el califato los descubre, se arriesgan a una decapitación en la plaza pública.
"Coge la calle principal, gira a la derecha, donde está la carnicería, sube las escaleras del primer portal, donde encontrarás el sótano del que te hablé. Te esperan, intenta hablar con mi padre y los niños. (¡Gracias, querido!)". Son las palabras recogidas por el diario italiano de Dhiab Butrus, un refugiado de un pueblo de mayoria cristiana. Habla con un vecino suyo y amigo de la infancia, que ha prometido encontrar a su padre y a otros cuatro miembros de su familia. Pese a ser sunita, el vecino ha prometido ayudarle. 
Dhiab huyó de su localidad. "Cuando escapamos era de noche. Ellos dormían, no oyeron nada, y la mañana siguiente fueron capturados por los extremistas. Al comienzo tenían los móviles, hablabamos cada día. Pero desde el domingo pasado sus móviles están siempre apagados. No sé.... estoy intentando llamarles por teléfono a ver si puedo hacer algo para liberarlos", explica.
"Los hombres del Estado Islámico dicen que tenemos que convertirnos todos. Pero quizá haya una forma de pagar algo y hacer que vengan a Erbil. Tenemos que encontrar el interlocutor adecuado. Y mi amigo lo está buscando. Es un buen musulmán y los conoce a todos", cuenta el joven cristiano de 30 años, que no cesa en la búsqueda de su familia.
Otro ejemplo es el de un mullah local, casado con una cristiana. "Hablan de él como un santo", cuenta el diario. "Es un hombre realmente bueno. Ayuda a todos, sin diferencias entre cristianos o musulmanes. Viaja por los lugares donde han apresado a nuestros seres queridos", explican varios refugiados.
El religioso musulmán intenta salvar a las niñas de ser vendidas como esclavas, y se encarga de los ancianos que han sido abandonados. Pero "tiene que estar atento. Ya ha sido amenazado. No puede exponerse mucho. Podrían acusarlo de traición", explica otro refugiado. Gracias a la mediación del religioso, pudo hablar con su padre de 83 años, con su tío y tres primos por teléfono.

EVANGELIO:
            Dijo Jesús a sus discípulos: “no hay árbol sano que dé fruto dañado, ni árbol dañado que dé fruto sano. Cada árbol se conoce por sus frutos; porque no se cosechan higos en las zarzas, ni se vendimian racimos de los espinos. El que es bueno, de la bondad que atesora en su corazón saca el bien, y el que es malo, de la maldad saca el mal; porque lo que rebosa del corazón lo habla la boca (Lc. 6, 43-45).

SALIDA:
Jesús, nuestra paz, si nuestros labios permanecen en silencio, nuestro corazón te escucha y también te habla. Y tú dices a cada uno: abandónate simplemente a la vida del Espíritu Santo, tu poca fe basta.