Oración Comunitaria 08/05/2014

INTRODUCCIÓN
El Papa Francisco afirma que “las bienaventuranzas son los nuevos mandamientos. Pero si nosotros no tenemos el corazón abierto al Espíritu Santo, parecerán tonterías. ‘Ser pobres, ser humildes, ser misericordiosos no parece algo que te lleve al éxito’. Si no tenemos el corazón abierto y si no hemos saboreado aquella consolación del Espíritu Santo, que es la salvación, esto no se entiende. Ésta es la ley para aquellos que han sido salvados y que han abierto su corazón a la salvación. Ésta es la ley de los libres, con aquella libertad del Espíritu Santo”.
Con Francisco comenzamos diciendo: Oh Alto y glorioso Dios…

SALMO
Dios mío, confía tu juicio al rey,
tu justicia al hijo de reyes,
para que rija a tu pueblo con justicia,
a tus humildes con rectitud.
Que los montes traigan paz,
y los collados justicia;
que él defienda a los humildes del pueblo,
socorra a los hijos del pobre
y quebrante al explotador.
Que dure tanto como el sol,
como la luna, de edad en edad;
que baje como lluvia sobre el césped,
como llovizna que empapa la tierra.
Que en sus días florezca la justicia
y la paz hasta que falte la luna;
que domine de mar a mar,
del Gran Río al confín de la tierra. 

NOTICIA
«Viendo la muchedumbre, subió al monte, se sentó, y sus discípulos se le acercaron. Y tomando la palabra, les enseñaba diciendo:
1.       "Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos.
2.       Bienaventurados los mansos, porque ellos poseerán en herencia la tierra.
Soy María, vivo en España, y me siento satisfecha con mi vida actualmente, cada mañana me levanto en mi cama, decido qué ropa ponerme y después de desayunar, cojo un autobús para ir a la facultad. Me gusta mucho lo que estoy estudiando, así que habitualmente voy con ganas. Suelo pasar casi toda la mañana allí, y a medio día, vuelvo a mi casa para comer; vivo con mis padres, así que ellos hacen la comida cuando vuelven del trabajo. Tengo dos hermanos, una mayor y un hermano pequeño, estoy con ellos por las tardes y por la noche salgo a dar una vuelta, después vuelvo a mi casa, ceno si no lo he hecho en un bar, me pongo el pijama, y me voy a dormir.
3.       Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.
4.       Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos serán saciados.
Hola, soy Ahmed y vivo en Marruecos; me levanto muy temprano porque tengo que ir a trabajar; estaba escolarizado, pero mi familia es pobre y no tengo tiempo para ir a la escuela, así que cada mañana temprano voy a limpiar a los animales. Hoy he tenido suerte porque mi vecino iba en coche al colegio y me han podido acercar a trabajar. El trabajo me gusta, aunque me encantaría poder entender los carteles y leer libros, pero si lo hiciera mis dos hermanos no podrían comer. Hoy me toca hacer la comida, pues desde que mi madre falleció tenemos que turnarnos para que no falte cada día. Por la tarde descanso un poco y juego al futbol con mis hermanos y mis amigos. Después de cenar, me voy pronto a dormir,  me acurruco en el suelo y me duermo rápido, pues mañana hay que ir pronto a trabajar.
5.       Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.
Me llamo Yin vivo en el sur de China, en la provincia de Guangdong,  estoy casada y tengo un hijo de 25 años que vive conmigo junto a su mujer. Me levanto a las siete de la mañana, me ducho y voy al mercado. Hago la compra del día, vuelvo a casa, desayuno con toda la familia y nos vamos a trabajar. Trabajo en el hospital limpiando el material quirúrgico, entro a las ocho de la mañana y a las doce almuerzo en el bufet del trabajo. Salgo a las cinco y me reúno con mi familia y amigos en el salón del Té. Cuando anochece nos vamos a casa, vemos un poco la televisión y me voy a dormir.
6.       Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios.
7.       Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios.
Hola me llamo Mario. Vivo en Perlita, un caserío de la Amazonía Peruana. Soy muy feliz porque vivo con mi padre, mi madre, mi abuela y mis 6 hermanitos. Yo soy el mayor, así que todas las mañanas me voy con mi padre a la chacra para ayudarle, aunque hoy toca ir al puerto a esperar a la lancha para vender el maíz que recogí ayer. La verdad es que me gustaría poder ir más días a la escuela pero tengo que ayudar a mi familia. Me gusta que pase la mañana rápido y llegar a casa para comerme el plato de arroz junto con mis hermanos. Es un momento divertido porque me cuentan lo que han aprendido en la escuela. Por las tardes voy a casa de mi amigo John y juntos nos vamos a jugar al volley, después me voy a casa y me acuesto con mi familia. Así suelen ser mis días.
8.       Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos.
Somos Noam, Adi y Amir Maoz, tenemos 3, 7, y 10 años, vivimos en un kibutz cerca de la franja de Gaza, desde donde los grupos armados lanzan misiles. Cuando suenan las sirenas, tenemos 15 segundos para correr hasta el refugio más cercano. Hay veces que hay hasta ocho alertas al día. Es muy difícil estudiar con normalidad. No es algo a lo que uno se acostumbra, siempre te da miedo. En la escuela, algunos niños no pueden dejar de llorar. Muchos tienen pesadillas. A veces, la sirena no nos avisa a tiempo; una vez un misil cayó a sólo cinco metros de nuestra puerta. Hay esquirlas por toda la casa, tenemos suerte de que no nos haya pasado nada.
9.       Bienaventurados seréis cuando os injurien, y os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa.
Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en los cielos.»

LECTURA ROMANOS 12
El amor  sin fingimiento: aborreciendo lo malo, apegaos lo bueno; Amándoos los unos a los otros con caridad fraternal; rivalizando en la estima mutua; En la actividad no os echéis atrás; ardientes en espíritu; sirviendo al Señor; Que la esperanza os tenga alegres, sed enteros en las dificultades y constantes en la oración; Haceos solidarios de las necesidades de los consagrados; esmeraos en la hospitalidad Bendecid a los que os persiguen: bendecid y no maldigáis. Alegraos con los que están alegres: llorad con los que lloran. Unánimes entre vosotros: no penséis en grandeza, que os tire lo humilde. No seáis sabios en vuestra opinión. No paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres. Si se puede hacer, cuanto está en vosotros, tened paz con todo el mundo.

PETICIONES

PADRE NUESTRO

SALIDA
La palabra DICHOSOS, descubre un componente fundamental:
La fiesta, la alegría del Reino.
Podríamos pensar que Jesús afirma:
¡Cuánto más felices seríais si no necesitarais tantas cosas!
¡Cuánto más felices seríais si vuestro corazón no fuera violento!
¡Cuánto más felices seríais si vuestro corazón fuera transparente!¡Cuánto más felices seríais si fueseis sembradores de paz!
¡Cuánto más felices seríais si trabajarais por un mundo justo!
Y si os persiguen y tenéis que sufrir por todo eso,
¡Más felices todavía!
José Enrique Galarreta

Y terminamos con Francisco diciendo, “Te adoramos señor Jesucristo, aquí  y en todas la iglesias que hay en todo el mundo, y te bendecimos, pues por tu santa cruz redimiste al mundo.”