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Etiquetas: oración del jueves

Oración Comunitaria 3/01/2008

ESCUELA DE ORACIÓN:

Entrada:

¿Acaso no somos todos un poco como los Magos de Oriente? ¿Acaso no buscamos la felicidad por mil caminos? Cada mañana nos levantamos con la esperanza de encontrar la luz. Al atardeced se nos apaga un poco más la luz de los ojos, porque la estrella se ha escondido en los cruces de los caminos, en el ajetreo de la vida. ¿Sería que buscamos mal?


En ti, Jesús, está la vida,
Una vida abundante, en plenitud.
Naces en nuestra tierra,
Como nace el manantial
Que ya no puede contener el agua por más tiempo.
Naces y rompes toda oscuridad,
Como la rompe cada mañana el sol que nace de lo alto.
Tu vida es nuestra luz
Tu luz limpia nuestros ojos ciegos
Tu luz brilla en la tiniebla
Rompe la tela de araña
que tejen los miedos en el corazón
La tiniebla no te recibe ni la mentira
Tu palabra es la luz verdadera
Que alumbra a todo ser humano
Que le abre el corazón
Tu luz nos hace hijos
Tu luz nos hace hermanos.


SALMO:

Salmo 18, 2-7

El cielo proclama la gloria de Dios
y el firmamento anuncia la obra de sus manos;
un día transmite al otro este mensaje
y las noches se van dando la noticia.
Sin hablar, sin pronunciar palabras,
sin que se escuche su voz,
resuena su eco por toda la tierra
y su lenguaje, hasta los confines del mundo.
Allí puso una carpa para el sol,
y este, igual que un esposo que sale de su alcoba,
se alegra como un atleta al recorrer su camino.
Él sale de un extremo del cielo,
su órbita llega hasta el otro extremo,
y no hay nada que escape a su calor.


NOTICIA:

¿Los reyes no llevan juguetes a los niños pobres?

Manu tiene 7 años, su principal interés navideño se centra en los regalos, por eso sus padres han trabajado con él el sentido de la Navidad y el desarrollo de actitudes solidarias. Su colegio organiza anualmente una campaña de recogida de juguetes para familias necesitadas. La pregunta era de esperar: “Mamá, ¿los Reyes Magos no llevan juguetes a los niños pobres?”

Es habitual que nuestros hijos vivan la Navidad centrados en los regalos que tradicionalmente “traen” los Reyes Magos. Sin embargo, hemos de esforzarnos en recuperar con ellos el verdadero sentido de la Navidad: el mejor regalo nos lo ha hecho Dios haciéndose uno de nosotros. Y no hemos de hacerlo aburrido, porque si no será difícil que nuestros hijos se inclinen por él.

Ante la campaña publicitaria que rodea a la Navidad, podemos trabajar con nuestros hijos la conciencia de moderación, el significado del regalo, el hecho de que el gran regalo de Navidad es Dios que se nos da y la idea de que regalar es también darse, pero sin destruir por ello la ilusión, porque también tiene algo del espíritu navideño. Aunque habremos de trabajar en la familia la idea de moderación, porque pueden ser muchos los que quieran regalar algo a nuestros hijos.

Y podemos ayudar a los pequeños a que tengan presentes a quienes no celebran la Navidad como nosotros. Sugerimos a nuestro hijo que incluya en su carta a los Reyes Magos “algo” para las familias necesitadas. Si además participamos en alguna campaña de recogida solidaria de juguetes, mejor que mejor. Entonces, la pregunta estará servida: ¿es que los Reyes Magos no llevan juguetes a los niños pobres?”.


LECTURA DEL EVANGELIO:


Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con disfraces de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces.
Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos o higos de los abrojos?
Así, todo árbol bueno da frutos buenos, pero el árbol malo da frutos malos.
Un árbol bueno no puede producir frutos malos, ni un árbol malo producir frutos buenos.
Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y arrojado al fuego
Así que por sus frutos los reconoceréis

Mt 7, 15–20

SALIDA:


El que camina hacia Dios va de comienzo en comienzo. ¿Serás tú de los que se atreven a decirse: "¡Comienza de nuevo! ¡Deja a un lado el desánimo! ¡Que tu alma viva!"!
Sé Luz para el camino, para el tuyo y el de los demás: con estas propuestas podemos dar pasos hacia una navidad distinta, podremos ser luz para otros…

- Cuando el ambiente nos empuja a ser más grandes que los otros, hagámonos pequeños.

- Podemos hacer visible la bondad en medio de la enfermedad, en el lugar de trabajo, en la comunidad, asumiendo con alegría los problemas.

- Dejarnos afectar por los que peor lo pasan en el mundo, volviendo la mirada para ver los rostros de los que sufren.

- Ser signos de vida y alegría, en lo que somos y hacemos, porque no todo da lo mismo. Donde hay creatividad y belleza se origina expectación ante el misterio.

- Mirar la vida de las personas con atención, hay que empezar a mirarlo todo con mejores ojos.

- Escuchar los sonidos de la vida, oír voces, que no son las nuestras, y ahora quien las escucha, descubre lo hermosa que es la danza de la fraternidad.