Oración Comunitaria 31/01/2019
ORACIÓN 31 ENERO 2019
ENTRADA:
Cae la tarde, va llegando la semana a su fin, y los momentos comunitarios se hacen casi palpables. Como hijos de un mismo Padre, que nos reúne, nos acompaña, nos sostiene, nos da su calor, oremos con la vista puesta en él, pero con todos los sentidos puestos en los hermanos que tenemos a nuestro lado, pues solo con ellos y junto a ellos será posible la realización de este camino en la construcción del reino de Dios, la realización del mandamiento del amor. Amor como el que nuestro hermano Francisco derrocho. Con él comenzamos diciendo todos juntos, “Oh alto y glorioso Dios…”
Canto:
SALMO 23, 1-6
El SEÑOR es mi pastor, nada me falta; en verdes pastos me hace descansar. Junto a tranquilas aguas me conduce; me infunde nuevas fuerzas. Me guía por sendas de justicia por amor a su nombre.
Aun si voy por valles tenebrosos, no temo peligro alguno porque tú estás a mi lado; tu vara de pastor me reconforta.
Dispones ante mí un banquete en presencia de mis enemigos. Has ungido con perfume mi cabeza; has llenado mi copa a rebosar.
La bondad y el amor me seguirán todos los días de mi vida; y en la casa del SEÑOR habitaré para siempre.
Silencio y Canto:
NOTICIA: NO TODO ES MALO. ABC (Andalucía)' - 2019-01-27. PEDRO G. CUARTANGO
Las cosas más obvias son las misteriosas. Hay acontecimientos que se muestran delante de los ojos y que aceptamos como evidentes, pero no lo son. Por ejemplo, esa mezcla de solidaridad y compasión que ha unido a la sociedad española estos días con la esperanza de que Julen fuera rescatado con vida.
Me he despertado con un sobresalto alrededor de las cuatro en la madrugada del sábado y he sentido el impulso de encender la tableta. Tenía todavía la esperanza de un milagro: que el niño de Totalán estuviera sano y salvo. Al enterarme de la noticia, he mirado por la ventana y la calle estaba vacía. Como si el tiempo se hubiera parado. En ese momento, me ha venido a la mente el pensamiento de que miles de personas compartíamos la misma sensación en medio de la noche.
No, no ha sido posible salvarle, pero este trágico episodio ha sacado lo mejor de las 300 personas que han trabajado sin descanso en el pozo y de los millones de españoles que han seguido día a día lo que acontecía en ese lugar de Andalucía. Ingenieros, mineros, bomberos y policías, todos unidos, también todas las administraciones, en el empeño de superar las enormes dificultades para rescatar a Julen.
Hay unas palabras de León Tolstoi que siempre me han iluminado: «He comprendido que mi bienestar es sólo posible cuando reconozco que estoy unido a las personas de este mundo, sin excepción alguna». No deberíamos olvidar jamás que todos los hombres somos hermanos y que nada de lo que sucede a los demás nos puede ser indiferente.
Por eso, no entiendo a quienes se niegan a acoger a los inmigrantes que llegan en pateras a nuestras costas o a quienes vuelven la espalda a los desheredados sin techo que sobreviven en nuestras ciudades, un espectáculo que se hace insoportable España es un país cainita, lleno de envidiosos, enfrentado políticamente y desvertebrado territorialmente. Pero jamás podremos negar que hay un sentimiento de solidaridad en una mayoría de la población, que ha sacado lo mejor de sí misma durante la última crisis económica y en este desgraciado episodio de Julen. Por una vez, hemos dejado de lado el sectarismo y el rencor y todos, sin distinción de filias políticas ni identidades geográficas, hemos deseado lo mismo.
La lección que podemos aprender de la muerte de este niño es que cuando nos preocupamos de los demás, cuando les echamos una mano, cuando nos acercamos a los que sufren, nos sentimos mucho mejor y yo diría que incluso somos más felices.
Al final de nuestra existencia, no sentiremos orgullo por haber amasado una fortuna, por haber gozado de un alto nivel de bienestar, por haber llegado lejos profesionalmente o por haber sido más listos que el prójimo. De lo único de lo que podremos enorgullecernos es de haber sido buenas personas.
Ninguno de los hombres y mujeres que se ha esforzado estos días en Totalán en salvar a Julen ha perdido su tiempo. Justo al contrario: nunca podrían haber empleado mejor sus esfuerzos y sus capacidades. Siempre les quedará el consuelo de que hicieron todo lo que estaba en su mano.
Ya decía Thomas Carlyle: «Cuando los hombres se unen para lograr algún fin, descubren también que pueden alcanzar otros fines si siguen unidos».
Silencio y Canto:
EVANGELIO Marcos 3, 31-35
Vienen después sus hermanos y su madre, y quedándose afuera, enviaron a llamarle. Y la gente que estaba sentada alrededor de él le dijo: Tu madre y tus hermanos están afuera, y te buscan. El les respondió diciendo: ¿Quién es mi madre y mis hermanos? Y mirando a los que estaban sentados alrededor de él, dijo: He aquí mi madre y mis hermanos. Porque todo aquel que hace la voluntad de Dios, ése es mi hermano, y mi hermana, y mi madre.
Silencio y Canto:
Oración compartida
Padre Nuestro
SALIDA
En nuestras manos esta poder hacer la voluntad de Dios. Pidámosle al espíritu santo y a nuestra madre Maria, que nos acompañen en la misión que Jesús nos encomienda.
Canto